viernes, 8 de junio de 2012

Chicle de fresa


Ver alejarse la consciencia de uno mismo mientras se llega a la conclusión de que el hombre (como especie) perdió el alma cuando las palabras dinero y ropa se volvieron no contables.
Despertar en medio de la niebla y darse cuenta de que uno no llega. Volver a intentar dormir al darse cuenta de que no sabe a dónde.
Todo se tiñe de fetidez y los dedos de los pies agarran desesperados el borde del abismo.
Sabiéndose curado, uno sigue sintiendo dolor.
Posición fetal deconstruída, ronquidos ajenos que se vuelven más ajenos si cabe en el sueño. Que se unen al chirrido nocturno que culmina la cadena de importunios.

Despertar.
Son las 9.
Mierda.
He calculado mal.

1 comentario:

  1. maldito calculo mental.Yo tambien soy mas de letras, un par de paginas y a dormir otra vez.( sabado a las 9,18 )

    ResponderEliminar