martes, 29 de junio de 2010

Smells like children



No echo de menos la infancia
El no pensar no me alivia
El temor masificado por los errores más insignificantes
Las mentiras transparentes
La incongruencia la conservo, guardada con celo junto al asombro...
Lo demás, lo dejo atrás
El orgullo tonto es otra cosa, me lo quedo porque me empuja hasta lo inalcanzable
Reír hasta llorar? Llorar hasta reír? Nunca lo hice ante ojos ajenos
Cavar mi propio sepulcro será divertido, lo sé
Trazar el plan que apretará el gatillo, más aún
Un plumazo, un polvorazo, un estallido que implosionará contra moléculas dilatadas...
Realmente me alegro de haber escapado, aunque sea por milésimas de segundo, a la llegada del subnormalismo profundo


"Hay una antigua ilusión que se llama bien y mal" - Nietzsche